Cuando el viernes llegué del instituto, me encontré sobre la mesa de la cocina la revista de las procesiones de semana santa de Cáceres. Prefiero ni pensar en lo que habrá costado una publicación con ese tipo de papel y fotos en color.
Lo que confieso que me desquició (Chose, que me conoce mejor que nadie, la había dejado allí para gastarme una broma) fue ver en la portada, bien clarito, el logotipo de la candidatura de Cáceres 2016. Creo que no es necesario hacer más comentarios. Ésa es la idea que en esta ciudad se tiene de la cultura: un nazareno con la cara ensangrentada y cargando una cruz.
Así nos va.
Lo que confieso que me desquició (Chose, que me conoce mejor que nadie, la había dejado allí para gastarme una broma) fue ver en la portada, bien clarito, el logotipo de la candidatura de Cáceres 2016. Creo que no es necesario hacer más comentarios. Ésa es la idea que en esta ciudad se tiene de la cultura: un nazareno con la cara ensangrentada y cargando una cruz.
Así nos va.
Aquello de "Pan y circo" (con todas sus variantes) sigue valiendo.
ResponderEliminarAhora sólo falta patrocinar a alguna hermandad del Rocío, y todo perfecto.
En efecto, así nos va.
cómo eres...
ResponderEliminarel día que te oiga un comentario positivo sobre la cultura en cáceres...
iré yo misma a ponerte el termómetro.
nah. no me lo tengas en cuenta.
un besote