domingo, 21 de junio de 2009

Tetada en el paseo de Cánovas


Ayer por la mañana, en el paseo de Cánovas, se reunió un grupo de madres para dar el pecho todas a la vez a sus retoños; esto es, para hacer una tetada. Irene, con sus veintiséis meses, era la niña de más edad. Había que ver las caras de asombro de más de uno al ver a unas doce mujeres dando de mamar. A mí la imagen me pareció preciosa. Y de paso un pelín provocadora. Ya está bien de bailarle el agua a los que deciden, por puro interés económico, que lo mejor para un niño es el biberón, la leche artificial, dejarlo llorar y dormir solo. Porque, no nos engañemos, ése es el único motivo para que quien quiere amamantar lo tenga difícil (en los hipermercados, por ejemplo, a las madres y a sus hijos hambrientos los destierran al servicio). Si la lactancia materna se prolonga, ¿de qué van a vivir los que fabrican el arsenal de pamplinas que hay que, se supone, comprar a un recién nacido?



La tetada se celebró en medio de una feria de productos ecológicos. El señor que explicaba en ese momento cuáles eran las bondades de las almendras que producían estaba sorprendidísimo con su auditorio. Y eso que no podía quejarse. Más atentas imposible. A ver quién es el guapo que en esas circunstancias echa a correr.

4 comentarios:

  1. Genial, genial...cosas como esta te hablan de un mundo vivo y por descubrir. Gracias por este regalo de lunes. Un abrazote. Tino

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  2. Amigo José María:

    Llegué a tu blog gracias a María José de Acuña, de Baile del Sol. Te conocía de referencia pero ha sido un placer leerte. Muy fresca la entrada, y aún más fresca debió de ser la imagen que la inspiró.

    Un saludo desde Estocolmo

    Antonio Álvarez Gil

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  3. Estimado Antonio: Gracias por leer este blog desde tan lejos. Desde hace años soy lector tuyo (magnífico, por cierto, el libro que te sacó el Centro de la Generación del 27). Seguimos en contacto. Un abrazo.

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  4. Gracias a ti, José María, por tus amables palabras sobre mi libro. El tuyo, por desgracia, no he tenido la oportunidad de verlo. En mi próximo viaje a España trataré de encontrarlo para leerlo. Será un placer, seguramente. Por otra parte, he comenzado a escribir mi propio blog, aunque todavía tengo mucho que aprender. Si le echas un vistazo, te agradeceía cualquier consejo o sugerencia.

    Un abrazo

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